En el último mes he tenido sorpresas gratas con mis amigos: cuando camino por la universidad o por la biblioteca Luis Ángel Arango, y me encuentro a algún conocido este me pregunta por las votaciones en “Blogobundos” o me hace algún comentario sobre algún post. Este prodigio se lo debo a participar en el concurso de marras.
Cuando me inscribí a este torneo no pensé pararle muchas bolas, lo confieso. Después que Raúl me dijo que había sido seleccionado y que empezaban las votaciones me dije: “hombre, mande algunas invitaciones para que conozcan el blog y de paso dígales que voten por usted en el certamen”. Y así lo hice. Envíe una centena de correos a conocidos y a desconocidos. El resultado, si ustedes lo recuerdan, fue maravilloso. De estar en la cola ascendí a los primeros puestos. En estos he estado (y al parecer estaré) hasta el final. Al término de la semana ante pasada decidí colgar publicidad en el muro de los grupos de Facebook a los que estoy asociado. El conteo creció de nuevo y con él el júbilo de este humilde servidor. El viernes de la semana pasada, por último, envíe correos a mis amigos más cercanos vía Facebook y a los asociados de los grupos de los que soy administrador o creador. Estos correos obraron tres prodigios: subir vertiginosamente el número de votos, recibir una centena de correos en los que me informaban que se solidarizaban con la causa o que, simple y llanamente, habían votado y, como les dije al comienzo, que todos mis amigos conocieron mi blog. Este último es, por supuesto, el más importante de todos.
Claro que no todo fue miel y leche: también hubo detalles feos. El júbilo y la alegría se vieron opacados por la guerra verbal que sostuvieron algunos señores que decidieron, sin permiso de Sergio ni mío, “defendernos” con improperios y frases bajas. Estos, afortunadamente, cesaron el domingo su verborrea gracias a que Sergio y yo los instamos a que interrumpieran sus prácticas.
En las postrimerías del certamen sólo me resta agradecerles a cada uno de las señoras y los señores que votaron por mí; gracias a ustedes recaude más de medio millar de votos, lo cual es, a todas luces, un gran triunfo.
Sólo nos resta esperar los resultados del conteo de votos…
Bueno no tanto así; si usted no ha votado por mí y quiere hacerlo tiene hasta el medio día de hoy. Hacerlo es muy sencillo: entre a Vagabundos V.I.P. Busque en la columna de la derecha Con Vocación de Espina (Séptimo en la lista); pique en el circulito que está a la izquierda del nombre; pique abajo en votar y listo. ¡Ah! No se le olvide que sólo puede votar una vez.